Por María Cañete Usón
Las situaciones de emergencia, sean naturales (terremotos, inundaciones, incendios) o provocadas por el ser humano (accidentes, atentados, catástrofes), tienen un impacto significativo en las personas involucradas. Las consecuencias, además de físicas, también son emocionales y psicológicas.
La psicología de emergencias es una disciplina que busca intervenir de manera rápida y eficaz, con el objetivo de reducir el sufrimiento psicológico, facilitar el proceso de adaptación a la crisis y prevenir trastornos a largo plazo, proporcionando apoyo emocional inmediato y ayudando a las personas afectadas a gestionar el impacto psicológico del evento traumático.
¿Qué funciones tiene un psicólogo de emergencias?
1. Evaluación psicológica rápida: Identificar aquellos individuos que están más vulnerables a sufrir consecuencias graves, como aquellas que han presenciado o vivido experiencias de alto impacto, o aquellos que muestran signos claros de angustia emocional (como crisis de pánico, desorientación o reacciones extremas).
2. Primeros auxilios psicológicos: Proporcionar apoyo emocional inmediato, ofreciendo un espacio seguro para que las personas puedan expresar sus emociones, aliviar su angustia y comenzar a procesar la situación vivida.
3. Prevención de trastornos psicológicos posteriores: Aunque las reacciones emocionales intensas son normales después de una emergencia, una intervención temprana y adecuada puede prevenir el desarrollo de trastornos más graves a largo plazo. Los psicólogos de emergencias trabajan para identificar las señales de alerta temprana y proporcionar el apoyo necesario para evitar que las víctimas sufran secuelas psicológicas duraderas.
4. Psicoeducación: Implica explicar las reacciones emocionales comunes ante situaciones extremas, como el miedo o la desorientación, y enseñarles a los individuos herramientas de afrontamiento, como técnicas de relajación, control de la respiración o manejo del estrés.
5. Apoyo a equipos de respuesta a emergencias: Los psicólogos no solo trabajan directamente con las víctimas, sino también con los equipos de emergencia y los profesionales de la salud involucrados en la intervención. En estos casos, su función incluye ofrecer apoyo psicológico a los trabajadores de primera línea (como bomberos, médicos, policías, etc.), quienes también están expuestos a altos niveles de estrés y sufrimiento emocional durante y después de las crisis.
6. Acompañamiento a los familiares: La gestión del duelo y el acompañamiento emocional a los familiares de víctimas mortales es otro de los aspectos fundamentales de la intervención psicológica en emergencias. El psicólogo proporciona contención emocional a quienes han perdido a un ser querido y les ayuda a atravesar las primeras fases del duelo, promoviendo su bienestar psicológico en un momento de gran dolor y confusión.