Mis visitas frecuentes en mi silla de ruedas eléctrica desde Pedrola hasta Alcalá de Ebro es todo una experiencia rica en belleza natural y significado cultural y literario . Este trayecto aunque peligroso por cruzar la carretera , ofrece una vista espectacular de los campos aragoneses, culminando en el tranquilo pueblo de Alcalá de Ebro.
Alcalá destaca no solo por su entorno natural, donde el río Ebro brinda serenidad y vida, sino también por su profundo arraigo literario. Aquí, la historia de «Don Quijote» cobra vida, ya que se cree que Alcalá inspiró la ínsula Barataria de Sancho Panza. Una estatua de este personaje famoso que abraza el pueblo,mirando al Ebro recordando su breve reinado literario, en cuyo libro el ingenioso hidalgo Don Quijote de la mancha se puede encontrar frases como la siguiente
—Y siendo yo gobernador, que es más que ser alcalde, ¡llegaos, que la dejan ver! No, sino popen y calóñenme, que vendrán por lana y volverán trasquilados, y a quien Dios quiere bien, la casa le sabe, y las necedades del rico por sentencias pasan en el mundo, y siéndolo yo, siendo gobernador y juntamente liberal, como lo pienso ser, no habrá falta que se me parezca. No, sino haceos miel, y paparos han moscas; tanto vales cuanto tienes, decía mi agüela, y del hombre arraigado no te verás vengado
El pueblo mismo es un encanto con La Iglesia Parroquial de la Santísima Trinidad
Este lugar invita a la reflexión, a disfrutar del paisaje del Río Ebro simplemente a pasear por sus calles, accesibles para cualquier persona con discapacidad sus espacios públicos y municipales también lo son , puedes visitar la estatua de Sancho Panza ir al embarcadero subir al barrio alto o volver a casa por foguera, sin ningún tipo de problema ,pero lo mejor de Alcalá de Ebro son sus gentes son encantadoras empezando por su alcalde hasta el ultimo de sus vecino gracias por su apoyo, por sus sonrisas y amabilidad.
En resumen, este paseo es más que un viaje; es una inmersión en la belleza natural, la historia local y la literatura, accesible y disfrutable para todos, especialmente para quienes, como nuestro protagonista, encuentran en el visitante una puerta a nuevas aventuras.
Agustin Sancho Cubero