En la vasta región de Aragón, Pedrola se erige como un ejemplo vibrante de desarrollo económico y sostenibilidad. Este municipio, ubicado en la Ribera Alta del Ebro, ha experimentado una transformación notable en las últimas décadas, convirtiéndose en un pilar fundamental para la economía de la comunidad autónoma.
Históricamente, Pedrola basaba su economía en la agricultura, pero la llegada de la industria automotriz con la instalación de Opel en Figueruelas en los años 80 marcó un antes y un después. Este evento no solo diversificó su base económica, sino que también atrajo a numerosas empresas auxiliares, convirtiendo a Pedrola en un epicentro industrial. Hoy en día, la industria representa el 90% de la economía local, con polígonos como El Pradillo y La Ermita siendo centros neurálgicos de actividad.
Lo que distingue a Pedrola no es solo su crecimiento industrial, sino su enfoque hacia la sostenibilidad y la innovación. Empresas como Sphere Group Spain, especializadas en plásticos biodegradables, demuestran el compromiso del municipio con la economía circular y las energías renovables. La integración de proyectos fotovoltaicos y la mejora de infraestructuras logísticas, es muy importante de cara al futuro.
La inversión de Stellantis en la planta de Figueruelas, con un monto de 4.100 millones de euros, promete generar miles de empleos y expandir la industria auxiliar, lo que indudablemente impactará positivamente en Pedrola. Este municipio no solo ha sabido adaptarse a los cambios económicos, sino que ha aprovechado su ubicación estratégica, su acceso a recursos naturales y sus excelentes comunicaciones para atraer inversión y generar riqueza.
Además, Pedrola no ha descuidado su calidad de vida. Con servicios públicos de calidad, una fuerte apuesta por la cultura, el deporte y la igualdad, el municipio se ha convertido en un lugar atractivo para vivir y trabajar, mitigando así la despoblación rural. Su compromiso con el desarrollo sostenible, la innovación y el bienestar social lo posiciona como un modelo a seguir dentro de Aragón.
En resumen, Pedrola no es solo un motor económico; es un ejemplo de cómo la planificación estratégica y el compromiso con el futuro pueden transformar un municipio en un referente de desarrollo económico regional. Con su industrialización sostenible y un enfoque en la calidad de vida, Pedrola está destinada a seguir siendo un pilar crucial en la economía de Aragón.
