La enfermera Verónica Gracia salvó la vida a un hombre que se estaba atragantando en el vermú popular que se celebró el miércoles 24 de agosto durante las fiestas de Figueruelas.
Verónica trabaja desde hace 8 años como enfermera, y actualmente está haciendo la especialidad de Salud Mental y formándose en el Hospital Clínico de Zaragoza. La fortuna ha querido que este año esté disfrutando de las fiestas de su pueblo ya que como señala “son mis primeras vacaciones en fiestas de Figueruelas, nunca las había tenido”. Verónica se encontraba en el tradicional vermú popular que se celebra el día del Santo Cristo en la sala multiusos. “De repente me llama mi madre gritando”, cuenta. “Me asusté, tiré el bolso, solo escuchaba mi nombre. Y vi que un señor mayor, de unos 85 años, se estaba atragantando, tenía una coloración pálida y no podía respirar”.
Verónica le empezó a realizar la maniobra de Heimlich pero no funcionaba. “Era imposible, no le salía nada. De repente se desvaneció porque se estaba quedando inconsciente, no podía respirar”, explica. Entonces decidió hacerle la RCP o reanimación cardiopulmonar: “Se hacen 30 compresiones y 2 insuflaciones, pero no llegué ni a la sexta. Enseguida empezó a romper y echó un poquito de vómito”. Luego lo colocaron en posición lateral de seguridad para que no se atragantase ya que seguía echando restos. “Continué con compresiones abdominales y se recuperó, empezó a respirar y recobró la coloración”.
Gracias a la rápida y competente actuación de Verónica el incidente quedó en un gran susto. “La gente me ha dado la enhorabuena. Fueron unos momentos estresantes, pero luego te sientes muy orgullosa de que una persona pueda seguir viva gracias a ti”.
La enfermera señala que sería importante que todo el mundo supiéramos reaccionar ante estos momentos de estrés “que no son fáciles ni para nosotros que solemos ver este tipo de cosas. Pero hay que enseñar a la gente a reaccionar ante estas situaciones vitales porque un segundo es una vida”.