Por María Cañete Usón
Si estás leyendo esto y tienes mascota en tu casa, seguramente estarás de acuerdo en que es más que eso, es un compañero/a, amigo/a fiel y, sin saber muy cómo, produce en nosotros un alivio de nuestros sentimientos más difíciles.
En el mundo de la psicología, y sobretodo hoy en día, existen muchísimas modalidades de terapias, pero una de las que más llama la atención cuando se ofrece es la Terapia Asistida con Animales (TAA), y os preguntaréis, ¿Qué es esto?
Pues bien, la Terapia Asistida con Animales utiliza a estos como recurso terapéutico con el objetivo de mejorar las funciones físicas, cognitivas, emocionales y relacionales de las personas tratadas. El animal no es únicamente una herramienta, sino que forma parte del tratamiento y, obviamente, este proceso terapéutico debe ser dirigido por un profesional especializado en esta área.
Los tipos de Terapia Asistida con Animales que más se utilizan hoy en día son (de más a menos):
- Terapia con caballos (Hipoterapia)
Se suele aplicar a personas con esclerosis múltiple, trastornos generalizados del desarrollo como autismo, psicosis y síndromes asociados, alzheimer y otras patologías neurológicas.
Produce beneficios a cuatro niveles: Efectos físicos (transmisión de calor, solidez, fortalecimiento de la musculatura), fisiológicos (con el movimiento del caballo aumenta la capacidad de percepción de los estímulos), psicológicos (estimula la autoestima, aumenta la motivación y superación de sí mismo, mejora la atención concentración y lenguaje) y sociales (mejora la integración social de las personas con discapacidad al poder compartir la actividad con otros niños, favoreciendo la relación emocional con extraños, la sensación de pertenecer al grupo y las habilidades de comunicación y lenguaje).
- Terapia con perros
El principal objetivo es mejorar la calidad de vida y autonomía personal, siendo complemento de otras terapias, y se aplica principalmente a personas mayores (demencia, alzheimer, deterioro cognitivo), personas con trastornos del desarrollo (atención, memoria, percepción, lenguaje, resolución de problemas o interacción social), personas con enfermedades mentales tipo emocional, cognitivo o del comportamiento y personas con discapacidad física.
Los beneficios de esta terapia se resumen en tres niveles: Beneficio físico/sanitario (disminución de la presión arterial y frecuencia cardiaca, favorece la relajación, fortalece músculos y destrezas motrices, equilibrio, coordinación y estimula los sentidos), beneficio cognitivo (mejora el estado de ánimo, disminuye ansiedad y estrés, potencia el autoestima, crea sensación de utilidad y autonomía, evita la soledad, es un “antídoto” para la depresión, mejora la atención y concentración), y beneficio social (mejora las habilidades sociales y comunicativas).
- Terapia con delfines (Delfinoterapia)
El objetivo principal es motivacional, aunque ayuda también en el lenguaje, motricidad y atención. Estas terapias están dirigidas a despertar determinadas zonas del cerebro y reequilibrar los hemisferios cerebrales, activando el sistema inmunitario y autorregulando los procesos corporales.
Los delfines transmiten sus sonidos de ondas alfa a través de su “ecolocalización” es decir, el uso de ondas sonoras y eco para determinar la ubicación de objetos en el espacio. Las ondas que emiten, son capaces de equilibrarnos y hacernos sentir más a gusto y tranquilos.
Esta terapia se ha aplicado principalmente a pacientes con Síndrome de Down, discapacidad intelectual, depresión y autismo. Los beneficios más señalados son la relajación en el agua, el reforzamiento de movimientos coordinados y armónicos dentro del agua, la mejora de la coordinación fina, el desarrollo de la atención y concentración y la estimulación de la circulación sanguínea al favorecer la flotabilidad.
En la actualidad, uno de los focos en los que se ha centrado la Terapia Asistida con Animales es dar soporte emocional a los profesionales sanitarios después de haber vivido la pandemia del COVID 19, procurando cuidar la salud mental, aminorar el estrés psicológico y generar recuerdos positivos.
Existen muchos más estudios e investigaciones para avanzar en el descubrimiento de los beneficios asociados de este tipo de terapias y aprender poco a poco de nuestros mejores amigos, los animales.
